Funcionamiento
En los circuitos de distribución de agua caliente para uso sanitario, en cumplimiento de las disposiciones actuales en materia de instalaciones para el control de la Legionela, es necesario garantizar que todos los tramos se mantengan a la temperatura correcta. La red de recirculación debe estar equilibrada para evitar distribuciones no uniformes de temperatura, tramos fríos y riesgos de proliferación de Legionela.
El regulador termostático instalado en cada tramo del circuito de recirculación mantiene de manera automática la temperatura seleccionada. Mediante la acción de un cartucho termostático interno específico, modula el caudal de fluido en función de la temperatura del agua de entrada.
Cuando la temperatura del agua se acerca al valor seleccionado, el obturador reduce progresivamente el paso. De este modo, el caudal de fluido, empujado por la bomba de recirculación, se distribuye en las otras partes de la red, asegurando un efectivo equilibrio térmico automático. En caso de necesidad, el regulador se dota de una función de desinfección térmica, útil si se desea levantar la temperatura en la red a mas de 55 ÷ 60ºC.
Esta función puede ser totalmente automática, mediante un segundo cartucho termostático que interviene a 70ºC, o controlada mediante un actuador electrotérmico.